LA REALIDAD

LA REALIDAD

miércoles, 16 de febrero de 2011

NOS QUEDAMOS SIN EL MUSEO DE BELLAS ARTES

Las esperanzas que los numerosos amantes de las Artes Decorativas -Pintura y Escultura, según la definición del diccionario de la R.A.E- en la isla de Gran Canaria teníamos en que en el antiguo hospital de san Martín, previas las obras necesarias, se instalase el demandado Museo de Bellas Artes, del que la capital insular, de la provincia de Las Palmas y cocapital autonómica, carece se han visto defraudadas una vez más por las noticias publicadas en los medios de difusión locales, en las que, si no entendí mal las declaraciones de la Consejera de Cultura (¿) del Cabildo de Gran Canaria, ese edificio se dedicará a "espacio cultural" -¿Qué querrá significar esto?-, no continuación del CAAM -Centro Atlántico de Arte Moderno-, pero si dependiendo de él, y donde se exhibirá con carácter permanente la colección de la institución insular , y además se podrán celebrar pequeños actos musicales. ¡Que decepción! Resulta que la Ciudad Real de Las Palmas de Gran Canaria es de las pocas urbes de España, si no la única, que no tiene un Museo de Bellas Artes, que cualquiera de las otras que se precie de cierto nivel cultural, la mayoría inferiores en importancia y en población a la nuestra poseen.

Aquí hacemos las cosas al revés de lo razonable, y empezamos la edificación por la azotea y no por los cimientos. Como palmaria e indiscutible prueba de esto, tenemos el mencionado Centro Atlántico de Arte Moderno, que es la azotea y carecemos del Museo de Bellas Artes en el que se expongan permanentemente obras de épocas precedentes de la pintura y de la escultura, que son los cimientos. El CAAM -que no es un museo sin unas salas de exposiciones- tuvo unos inicios aceptables, mostrando obras en cierto modo interesantes, dentro del camelo y la vulgaridad que constituye el "arte moderno", pero desde hace bastantes años lo que allí se expone son, salvo alguna mínima excepción, auténticas birrias, burlas a la inteligencia de un espectador con sensibilidad y conocimientos del arte decorativo, y además con una desmesurada inversión económica que constituye un auténtico despilfarro de dineros públicos, que mejor habrían podido dedicarse a la adquisición de obras de importantes maestros de las diversas épocas del susodicho arte, y que además podrían y pueden conseguirse por precios interesantes y asequibles a las arcas públicas por mediación del Dr. Matías Díaz Padrón, Conservador del Museo del Prado e investigador pictórico de prestigio universal por sus descubrimientos, Hijo Adoptivo de nuestra ciudad, que en más de una ocasión ha expresado su voluntad y deseo de colaboración en la consecución de ese Museo de Bellas Artes tan anhelado.

Pero una vez más -y ya he perdido la cuenta de cuantas- ha quedado demostrado con rotunda evidencia que nuestros políticos son unos patanes, aunque algunos presumen de cultos y creen que con la actividad musical ya tienen merecido tal calificativo, y dedican todo el presupuesto a la ópera, al ballet, a los conciertos y demás manifestaciones del arte de Euterpe, y algo al teatro oral, pero nada a las Artes Decorativas; por ejemplo, ¿cuántos cuadros de Néstor ha adquirido el Ayuntamiento para aumentar la colección, en depósito, que se exhibe en su museo? Que se sepa NINGUNO, y me gustaría equivocarme. Yo, como melómano, me congratulo de la importante actividad musical que se desarrolla en Las Palmas de Gran Canaria, una de las más numerosas de la nación. Empero, además de la Música, me gustan las otras Bellas Artes, entre ellas las verdaderamente Decorativas, las que han hecho historia. Y de ellas muy poquito, o nada, tenemos en nuestra isla porque carecemos de un Museo de Bellas Artes, que ¡hasta Santa Cruz de Chicharrelandia tiene! Vergonzoso. Me parece muy bien que en el ex hospital de san Martín se exhiba la colección del Cabildo, pero no en absoluto la celebración de "pequeños actos musicales" -¿Qué se querrá decir con esto de pequeños?- porque para la Música tenemos locales más que suficientes -el Auditorio Alfredo Kraus, el Teatro Pérez Galdós, el Paraninfo de la Universidad, el Teatro Cuyás, y posiblemente el Teatro Guiniguada -cuya obra no encuentro justificada porque ya hay demasiados centros de sus características, y es otro derroche de dineros públicos que se podrían dedicar a otros fines-.

Nuestros antepasados se preocuparon bastante por la Música y por el teatro oral, y levantaron edificios para que fueran interpretados en ellos, pero a pesar de haber tenido tantos pintores y escultores, algunos de gran calidad, que están en el recuerdo de todos los aficionados, NUNCA se les ocurrió crear un Museo de Bellas Artes, sobre todo a alcaldes "cultos" como Juan Rodríguez Doreste, del que me consta su devoción por las Artes Decorativas, y Jerónimo Saavedra, al que se la supongo, como el valor a los militares. Y ahora, con las grandes posibilidades que ofrece el ex hospital de san Martín, tampoco doña Luz Caballero, Consejera de Cultura - que me parece poseerla en ínfima medida- del Cabildo de Gran Canaria, lo lleva a cabo, frustrando esa antigua aspiración de los amantes de la pintura y la escultura en nuestra isla, y principalmente en la capital, y se pierde la gran oportunidad. Incomprensible, injustificable y censurable.

CARMELO DÁVILA NIETO

No hay comentarios: